Seguridad por vídeo de alta gama, espacio de almacenamiento reducido

Los aeropuertos no solo son las áreas sensibles para la seguridad más importantes del mundo, además deben cumplir las directrices legales más estrictas. Es el caso del Aeropuerto Internacional de Changchun-Longjia, situado en el nordeste de China, donde el rápido crecimiento económico y casi 13 millones de pasajeros al año hicieron necesaria la construcción de un edificio de terminal adicional. El vanguardista edificio de la Terminal 2 se extiende a lo largo de 55.600 metros cuadrados y dispone de seguridad por vídeo durante 24 horas según la normativa del Gobierno chino. Alcanzar ese nivel de protección no fue tarea fácil. Desde el año 2017, la legislación china exige el almacenamiento obligatorio de todos los datos de vídeo filmados en áreas públicas, como aeropuertos, durante un período de 90 días. Una hazaña difícil de cumplir desde la perspectiva de los responsables de seguridad, ya que los edificios de este tamaño requieren más de 1.000 cámaras grabando las 24 horas del día y preferiblemente en alta definición.

Al final, la seguridad por vídeo durante 24 h produce grandes cantidades de datos de vídeo y se otorga prioridad al correcto almacenamiento de los datos. Como consecuencia, los responsables de la seguridad del aeropuerto de Changchun intentaban limitar la cantidad de unidades de almacenamiento en las que se archivan los datos de vídeo, ya que estos dispositivos son muy costosos y consumen una enorme cantidad de energía para enfriarse. Como la construcción de la Terminal 2 tenía unos plazos muy estrictos, necesitaban un socio como único proveedor para garantizar que la seguridad por vídeo estuviera operativa —y cumpliera la normativa legal— desde el primer día.

Atendiendo a los requisitos del cliente, Bosch diseñó una solución a medida para el Aeropuerto Internacional de Changchun-Longjia basada en la experiencia acumulada en las instalaciones de seguridad aeroportuarias a gran escala, de todo el mundo. El equipo instaló cerca de 1.500 cámaras dentro y fuera de la Terminal 2. Las cámaras no solo proporcionan imágenes de alta definición y ayudan al personal de seguridad detectando amenazas automáticamente gracias a la tecnología de analítica de vídeo integrada. Además, las cámaras "inteligentes" son capaces de superar el desafío de almacenamiento de vídeo directamente desde el primer momento.

Las cámaras, conectadas en red, se gestionan centralmente a través de Bosch Video Management System (BVMS) y suministran los datos de vídeo a las unidades de almacenamiento en formato comprimido. Mantienen un espacio reducido de almacenamiento de datos y cumplen al mismo tiempo el requisito legal del Gobierno chino de almacenar los datos durante 90 días utilizando la tecnología de compresión H.265 integrada. Sin comprometer la calidad de imagen, la compresión H.265 reduce el ancho de banda de los datos y el espacio de almacenamiento hasta el 50 %. Como consecuencia directa, los responsables de la seguridad de Changchun han conseguido ahorrar costes reduciendo el número de unidades de almacenamiento, al tiempo que se recorta el consumo de energía y los costes de refrigeración de la sala de los servidores.

Además del ahorro en costes y energía, el sistema de seguridad de la Terminal 2 cumple los requisitos adicionales del cliente: el BVMS, como interfaz central, admite la búsqueda rápida de datos archivados, por ejemplo para responder a las solicitudes del Gobierno. Para enfrentarse al duro invierno típico de la región, las nuevas cámaras para exteriores resisten temperaturas de hasta -40 °C. Dentro de la terminal, la interfaz de las cámaras HD con nuevas soluciones de control de acceso, también instaladas por Bosch y conectadas al Building Integration System (BIS), proporciona una capa extra de seguridad: en las 350 puertas de la Terminal 2, una combinación de lector de tarjeta y seguridad por vídeo elimina el riesgo de que personas no empleadas accedan a las áreas críticas con una tarjeta robada y permite el paso fluido del personal autorizado sin comprobaciones adicionales.

Desde la apertura de la Terminal 2 en octubre de 2018, el sistema Bosch ha proporcionado seguridad de extremo a extremo a viajeros, personal y propietarios, conforme a los requisitos del Gobierno. También ha supuesto un ahorro en costes considerable en el almacenamiento de vídeo y el consumo de energía desde el primer día. Desde una perspectiva más amplia, cerca de 200 de los 497 aeropuertos del país requerirán ampliaciones similares en los próximos años y todas ellas deberán cumplir las mismas estrictas directrices de seguridad, por lo que Changchun se convertirá en una referencia importante para las Bosch Building Technologies de la región.